Este título para el momento en que vivimos es más que oportuno, según estudios una pausa o desaceleración en tu día laboral mejora tu productividad hasta en un 40 %; lo mismo pasa con el futbol.
Todo en exceso es perjudicial, si eres lento en todo momento te conviertes en una persona predecible y si por el contrario quieres hacer todo muy rápido nunca vas a hacerlo de manera adecuada y eficaz.
Las grandes creaciones de la humanidad vienen de esos momentos de tranquilidad que lleva a prosperar la magia y la música para tu cerebro; por eso disfrutamos de estos grandes jugadores que crean y hacen cosas impensables dentro de una cancha.
Analizando estos jugadores tienen una característica en común y es que manejan los ritmos de juego o también se podría decir en el futbol actual que es tan impetuoso, que desaceleran y hacen de la velocidad de sus compañeros una oportunidad de creación de tal manera que hacen creer a los demás que ven el futbol desde otra perspectiva.
Cuando un jugador hace un freno a su velocidad en su mente se abren una cantidad de posibilidades que podría hacer de su acción una mejor ejecución, esto no quiere decir que una pausa o una desaceleración tengan que ver con lentitud. O como piensa todo el mundo que el ser lento es sinónimo de bobo o estúpido.
Los mejores ejemplos son recordar a un Riquelme, un Pibe Valderrama o un Macnelly Torres; que sin perder la dinámica del juego convertían en la pausa la oportunidad perfecta y las mejores opciones para su equipo.
Te invito a que aproveches esta pausa que nos está dando la vida para hacer un freno a tu vertiginoso y acelerado modo de vivir, llevando consigo malas decisiones y realizar esta pausa para crear y reinventarnos, podríamos estar armando la mejor jugada de nuestras vidas y empezar a construir un mejor futuro para todos.